Sorpresa en el desayuno

La ubicación es inmejorable, en el corazón del centro histórico. Nos encantó la comida del restaurante, especialmente el desayuno con zumo recién exprimido. Los dueños son encantadores y siempre atentos.

La única pequeña desventaja es que el aparcamiento puede ser complicado, pero el hostal ofrece opciones y servicios para asegurar tu vehículo.

Las vistas del hotel son realmente encantadoras.

No puedo entender cómo en un lugar así el ruido no es prioridad. La ducha apenas funcionaba y el ruido de los platos de la cocina en la noche no me dejó descansar. Además, la falta de privacidad en la recepción fue frustrante, ya que cada vez que quería algo, todo el bar se enteraba.

recomendaría este lugar for unas vacaciones en la ciudad

Acogedor hostal, amable personal, cómodo desayuno, ubicado en una plaza con hermosa vista y a solo 100 metros de aparcamiento, lo que facilita explorar el lugar.

Todo fue perfecto

La comida del restaurante es excepcional, especialmente la merluza a la plancha y los postres caseros que ofrecen, como la crema de yogurt con helado de mandarina.

La recepción está situada en el bar del dueño, lo que puede resultar un poco incómodo y ruidoso, especialmente durante las noches.

la habitación tenía una ducha de hidromasaje, pero era complicada de usar.

experiencia memorable en el corazón de sos del rey católico

disfruté de una estancia maravillosa en este hermoso lugar, donde la cercanía a la plaza principal y la hospitalidad del personal hicieron que me sintiera como en casa, además de poder explorar fácilmente el Palacio de Sada, que está a solo 10 minutos caminando y la iglesia de San Esteban, a menos de 5 minutos.

Decidí no recomendar este hotel, a pesar de la 'alentadora' ubicación, la ducha casi no funcionaba y el ruido de los platos en la cocina era escandaloso. Esperaba un pequeño detalle por estas molestias, pero claro, eso no sucede con los 'clientes' comunes. Una estancia muy decepcionante, y casi dejo una buena reseña, pero no pude.

Durante mi estancia, disfruté de una habitación amplia y cómoda, lo que facilitó un buen descanso. El desayuno fue impresionante, con una gran variedad de opciones. Sin embargo, la recepción en el bar del propietario puede resultar un poco incómoda y ruidosa en horarios nocturnos, lo cual podría afectar la privacidad y el descanso de los huéspedes.

Una gran opción para una estancia temporal en Sos del Rey Católico con un buen precio. La cena fue sorprendentemente abundante, ¡pedimos dos platos y nos trajeron entradas extra! En verano, asegúrate de llegar temprano a la plaza si quieres descansar bien por la noche.

La verdad es que me encantó la cena, con platos abundantes y sabrosos que no me esperaba, ¡la merluza estaba de lujo! Además, disfruté de un buen rato en la terraza, perfecta para relajarse al atardecer. Solo habían algunos detalles menores que podían mejorar, como el ruido de la cocina en la noche, pero nada que arruinara la experiencia. 😊

Desayuno extraordinario, pero el bar puede ser ruidoso y complicado para descansar.

La ubicación es increíble, justo en la plaza principal de uno de los pueblos más antiguos que he visto. El desayuno era variado y lleno de sabores locales. El trato del personal siempre fue cálido, con recomendaciones útiles para explorar el área.

Podría mejorar un poco la privacidad en la recepción, ya que está en un bar del dueño que a veces puede ser ruidoso.

La habitación ofrecía una limpieza decente y un buen equipamiento, haciendo la estancia agradable. La ubicación en el casco antiguo es perfecta para explorar rápidamente todo el pueblo.

La recepción puede ser un poco incómoda, ya que se encuentra en el bar del dueño, lo que brinda una falta de privacidad. Además, el ruido del bar puede dificultar el descanso, especialmente si hay clientes hablando tranquilos y la tele encendida hasta tarde. Las almohadas son un poco altas, y no todos pueden encontrarlas cómodas. La comida en el bar puede ser decepcionante si buscas algo para picar a horas específicas, pues no siempre están listos para servir.

La ubicación es inmejorable, justo en la encantadora plaza del pueblo. La cena estuvo fantástica, especialmente la merluza, y el servicio fue excepcional. Fernando, nuestro camarero, fue muy amable y atento. Además, disfruté viendo las vistas históricas desde la terraza.

La ducha era un poco complicada de usar.